Nacida en Hiendelaencina (Guadalajara) en 1862, estudió en la Escuela de Institutrices de la Asociación, donde obtuvo su título en 1877. Desde 1883 fue profesora de varias asignaturas. A partir de 1889 desempeñó sin interrupción el cargo de Secretaria de las Escuelas hasta su fallecimiento en Barcelona en 1938.
Participó brillantemente en el Congreso Pedagógico Hispano-portugués de 1892 así como en la fundación del Centro Iberoamericano de Cultura Popular Femenina (1906). En Noviembre de 1907 fue nombrada vocal de la Comisión Técnica Auxiliar de las Escuelas Primarias.
En Febrero de 1931 el ministro de Trabajo Pedro Sangro y Ros de Olano le concedió, junto a Clementina Albéniz, la Medalla de Plata al Trabajo de 1ª Clase, que les fue impuesta por el presidente de la Asociación para la Enseñanza de la Mujer Juan Flórez y Posada en Mayo de 1931.
Según el archivo, la última referencia es una carta a Rafael Muñoz-Yusta fechada en Barcelona 1938. Otras fuentes afirman que pasó a Francia, donde falleció.